En 2013, China y Japón se encargaron de robarle el título de Rey del E-commerce a Estados Unidos, pero gracias al auge de su economía, que le permitió ser responsable del 15% del crecimiento del comercio electrónico a nivel global, este año volvió a colocarse al frente del grupo.
A pesar de que varias naciones descendieron en el ranking durante el último año, la región Asia Pacífico volvió a coronarse como la más fuerte en el universo del e-commerce. Sin embargo, esto no quiere decir que el resto del planeta continúa aletargado, pues debido a su impresionante rendimiento, México logró colocarse en el 17º lugar de la lista, arriba de países como Brasil y Argentina.
Pero para seguir con esta buena racha hace falta poner de nuestra parte. Actualmente, las ventas online en México están estigmatizadas, y a pesar de que poco a poco han comenzado a tomar fuerza, se ha convertido en una tarea difícil debido al contexto nacional.
De acuerdo con la información recabada por el sitio Rebeldes Online, sólo 2 de cada 50 tiendas virtuales consiguen obtener beneficios económicos y mantenerse a flote, ¿por qué razón? Por no optimizar el proceso de venta, no utilizar correctamente las herramientas de posicionamiento en Google, no llevar un control y, probablemente una de las más importantes, no explotar las redes sociales.
En promedio, el 79% de los usuarios de smartphone lo utilizan como herramienta para realizar compras online, ¿cómo aprovecharlo? El primer paso en este camino es implementar una tienda virtual, si ya se cuenta con una se debe optimizar para que el buscador sea eficiente y permita que los productos aparezcan por su nombre o modelo.
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